sábado, 17 de enero de 2009

Un año, maestros y aprendizajes

MAESTROS Y APRENDIZAJES

Podría decir que el 2008 fue el año en que aparecieron todos los maestros, es como si mi búsqueda hubiera hecho eclosión. El Universo decidió darme lo que desde hacía muchos años le pedía: Un Maestro. Alguien en quien confiar y con quien aprender. ¿Por qué el pedido? Quería encontrar una persona seria, evitar caer en la trampa de la chantocracia que rige generalmente en todos los ámbitos del saber.
Ya desde mayo del 2007 había incursionado en el Sistema Isha, muchas cosas del sistema no terminaban de cerrarme, así que en marzo del 2008, fui a la I, casa de todos los estudiantes en Uruguay. La experiencia fue muy positiva, conocí gente maravillosa de nuestro país y del exterior (Europa inclusive), sobre todo, pasé momentos inolvidables con un grupo de chilenos con los que aún hoy intercambiamos mails a diario o chateamos o nos comunicamos a través de facebook (Iolanda Daffunchio). Conocí también a una señora paraguaya, muy bella, creo que es un Ángel. Allí había buscadores de toda una vida como yo. Gente que había pasado por el budismo, por la India y/o sus enseñanzas, por el Tibet y/o sus enseñanzas, la metafísica, la astrología, psicólogos, etc. Sin embargo, había algo que seguía sin cerrarme, creo en la reencarnación desde niña y el Sistema la niega. No me quedó claro si la niega porque sí, o porque lo enfocan desde otro punto de vista. De regreso a Buenos Aires, seguí a los grupos de apoyo, seguí aprendiendo, pero... aún no me convencía... Fui también a Misiones, donde me escapé un día del encuentro internacional de estudiantes para ir a Cataratas, de esa experiencia ya hablé. En fin, promediando octubre, decidí que si bien el Sistema me había aportado muchos aprendizajes y mi visión de la vida, mi manera de pensar, mi carácter, mis noches de insomnio, habían experimentado una maravillosa transformación positiva, ese no era mi lugar.
Para ese entonces ya había entrado en contacto con el Centro de Kabbalah de Buenos Aires y había comenzado a estudiar con el rabino Fridman, quien brinda los cursos más interesantes a los que he asistido en mi vida. Interesantes y transformadores. En Kabbalah me encontré con los mismos conceptos que utiliza la Maestra Isha, sólo que en lugar de darlos como verdades procedentes de una maestra iluminada, se aprenden desde la razón, todo tiene una lógica. Mi mente es lógica y necesita explicaciones claras. La primera gran sorpresa fue encontrarme con que los kabalistas sí creen en la reencarnación. El primer libro que me recomendaron, cuando fui a el Rosh Jodesh de Aires (Cabeza de mes de Aries, Luna Nueva de Aries), fue Las ruedas de un alma. Ya no recuerdo cuántos ejemplares regalé después de haberlo leído. El último se lo regalé para su cumple a Stella, una amiga de la infancia reencontrada gracias a todos los aprendizajes del Sistema Isha que me permitieron enfocar la vida y la realidad de manera diferente. Volviendo a Las ruedas de un alma, es un libro que contiene la sabiduría de la Kabbalah y que explica de manera clara muchos de los “¿por qué?” de nuestra vida. Por fin, luego de 22 años, comprendí de manera acabada, lo que cuando mi hijo falleció me habían explicado, pero no podía aceptar ni comprender. Hoy estoy en paz, desde el Amor y la comprensión de cómo funciona el Tikún (Karma). Recomiendo la lectura a todos aquellos que hayan pasado por una experiencia similar y a quellos que creyendo en la reencarnación quieran completar o profundizar sus conocimientos sobre el tema, y para quienes no crean, una lectura no vendría mal.
Mientras estudiaba en el Centro, un día, haciendo zapping, gracias a que los canales de cable que cuando no ofrecen series norteamericans, sólo ofrecen zapping, llegué a un programa de Claudio María Domínguez, aquel niño prodigio que fascinó a todos los niños que no éramos tan estudiosos como él, fascinó a toda la sociedad. Claudio me inspira confianza absoluta, ese día estaba entrevistando a Alí Jimenez Blanco, conocido también como Salundi, quien entre otras cosas, hace regresiones a vidas pasadas. Desde los libros de Brian Weiss, estaba buscando con quien hacer regresiones sin tener que viajar a EEUU., el Dr. Weiss vino en varias oportunidades a Sudamérica, pero me encontraba siempre sin la posibilidad económica de ir a sus seminarios o me enteraba después de que había partido. Decidí que Salundi sería mi guía en esa experiencia que deseaba realizar con fines de sanación. (Sufro de migraña desde los dos años, pasé por todas las medicinas oficiales y alternativas, y sigo padeciendo esos dolores no gratos todos los días, estudié, formé una familia, seguí estudiando, enseñando, siempre con el dolor presente, dolor invalidante, molesto del que quiero despojarme en esta vida). Comenzamos la terapia de regresión y asistí a sus talleres. Sigo formándome y espero ansiosa su regreso a Buenos Aires.
Luego de una sesión, Salundi me dijo, señalando un poster, eso deberías hacer... El poster promocionaba la EMF Balancing Technique, me informé y tuve el honor de hacer las fases de I a IV entre la semana pasada y los primeros días de esta.
Lugar Amor y Gracias, maestros Gabriel Demaio, Adriana Nievas Demaio y Patricia Antonini. Tuve el honor de pertenecer a la primera camada de estudiantes preparados en buena medida por Patricia. Durante el seminario alguien sugirió que yo hacía todos los talleres, porque entre break y break hablábamos de nuestras actividades, el comentario, que no transcribo literalmente por irrelevante, me pareció agresivo e innecesario pero fue útil, porque mi respuesta inspiró estas líneas, le respondí, “aparecieron todos los maestros juntos”.
Mi búsqueda viene desde mis primeros años de vida, en aquel tiempo no sabía qué buscaba, pero buscaba, hacia los años 90, fui definiendo y comprendiendo quién era. Un hada entró en mi vida, se llama Cristina, y me enseñó Tarot y Astrología, las primeras clases fueron de Kabbalah,
Tuvieron que pasar 18 años para que diera con un Maestro y comenzara a desentrañar las preciadas enseñanzas kabalísticas. Ese camino continúa...
Como también continúan los estudios de Astrología, ciencia que me apasiona cada vez más.
A medida que fue transcurriendo el 2008, se sucedieron los maestros de tal manera que lo aprendido el día anterior ya era obsoleto porque nuevas enseñanzas abarcaban, profundizaban y ensanchaban los horizontes de las menos nuevas.
2008, año de aprendizaje, de estudio, de transmutación.
Una experiencia inusitada, que abarcó todo el año, fue el conocimiento, contacto y estudio de la técnica para tocarlos, de los Cuencos Tibetanos, de la mano del staff de Sonido Espiritual y de Rubén Marcote. Fueron beneficiosos para mi salud física y espiritual y hoy puedo tocarlos y sentir sus maravillosas y sanadoras vibraciones. El día en que tendría que haber hecho el taller de cuencos de cuarzo, coincidía con otros talleres, así que queda pendiente ese aprendizaje para el 2009. Como todo es sincrónico y causal, Salundi, el día en que lo conocí me recomendó tocar cuencos y le contesté: “hice mi primera taller la semana pasada”.
Sincronía y causalidad han guiado mis pasos hacia el 2009 en que gracias a Tamara, se abrió un taller de EMF en Amor y Gracias. Hoy sé que puedo decir con regocijo: Bienvenido 2009!
A todos mis Maestros y compañeros de ruta: los honro y los valoro!
Desde esta realidad multidimensional, desde mi naturaleza evolucionaria, los honro y los valoro y les agradezco todo lo aprendido.
Seguiremos nuestro camino honrando a otros humanos día a día.
Una vez más: ¡Bienvenido 2009!

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